MUJERES QUE AMAN DEMASIADO


...Cada movimiento que hacía uno se veía correspondido por el otro, lo cual daba como resultado una coreografía que permitía que sus estilos fluyeran sin interrupción, girando una y otra vez.


Cada vez que Sean se desligaba de una responsabilidad, ella se apresuraba a asumirla. Cuando ella reunía para si todas las cargas de criar a su familia, él se marchaba con una pirueta, proporcionándole lugar de sobra para ocuparse del cuidado. Cuando él buscaba otra compañía femenina en el escenario, ella suspiraba con alivio y apresuraba su danza para distraerse. Mientras él se alejaba bailando y salía del escenario, ella realizaba un perfecto paso de espera. Girando una y otra vez…


Para Melanie, a veces era un baile excitante, a menudo solitario; ocasionalmente, era avergonzante o agotador. Pero lo último que deseaba era detener el baile que conocía tan bien. Los pasos, los movimientos, todo le parecía tan bien que estaba segura de que ese baile se llamaba amor.


0 comentarios: